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jueves, 25 de abril de 2024

Tax me if you can

Impuestos a los superricos: Una nueva agenda para luchar contra la desigualdad a nivel mundial. Cinco ministros de Alemania, Brasil, Sudáfrica y España defienden la aplicación coordinada de un gravamen mínimo global sobre los multimillonarios como impulsor de la justicia social.

(Fuente: El Pais)
https://lnkd.in/dzG3Au3p

"En las dos últimas décadas hemos asistido a un aumento significativo de las desigualdades dentro de la mayoría de los países, ya que la diferencia de ingresos entre el 10% de los más ricos y el 50% de los más pobres casi se ha duplicado. De cara al futuro, las actuales tendencias económicas mundiales plantean serias amenazas al avance hacia una mayor igualdad".

"El carácter multidimensional de la desigualdad es innegable. Servicios básicos como la sanidad y la educación no están al alcance de todos por igual. Con frecuencia, esta desigualdad de oportunidades se transmite de generación en generación. El origen social, el género, la raza o el lugar de residencia son algunos de los factores que desempeñan un papel en la reproducción de las desigualdades".

"Además, una gran desigualdad perjudica el desarrollo económico porque inhibe la innovación e impide que las personas desarrollen todo su potencial. Es corrosiva para la democracia y debilita la cohesión social. Y cuando la cohesión social es débil, hay menos apoyo para las reformas estructurales que tendremos que emprender en los próximos años, como la necesaria transformación hacia una economía de cero emisiones".

"Es hora de que la comunidad internacional se tome en serio la lucha contra la desigualdad y la financiación de los bienes públicos globales. Uno de los instrumentos clave que los gobiernos tienen para promover la igualdad es la política tributaria. No sólo tiene el potencial de aumentar el espacio fiscal del que disponen los gobiernos para invertir en protección social, educación y protección del clima. Diseñada de forma progresiva, también garantiza que todos los miembros de la sociedad contribuyan al bien común en función de su capacidad de pago. Una contribución justa aumenta el bienestar social".

"Un gravamen mínimo mundial coordinado sobre los multimillonarios constituiría un paso significativo en esta dirección. Impulsaría la justicia social y aumentaría la confianza en la eficacia de la redistribución fiscal".

"Por supuesto, el argumento de que los multimillonarios pueden trasladar fácilmente sus fortunas a jurisdicciones de baja tributación y evitar así el gravamen es sólido. Y por eso la cooperación internacional y los acuerdos globales son clave para hacer efectivo este impuesto. Lo que la comunidad internacional consiguió hacer con el impuesto mínimo mundial sobre las empresas multinacionales, puede hacerlo con los multimillonarios".